La histotecnología y el embalsamado son campos que, aunque diferentes en su aplicación, comparten el propósito común de preservar la integridad de los tejidos humanos. Es posible que tengas un limitado conocimiento sobre estas disciplinas, puesto que no suelen ser mencionadas con frecuencia. Por esta razón se deben a conocer, ya que son sumamente necesarias.
Estas profesiones son muy importantes para la sociedad, debido a que contribuyen al avance de la ciencia, la salud, la educación y la justicia. Sin embargo, requieren de una formación especializada y de una vocación de servicio. En este artículo, descubrirás qué son la histotecnología y el embalsamado, qué hacen los histotecnólogos y los embalsamadores, y cómo puedes convertirte en uno de ellos, estudiando una carrera técnica en la Universidad Veracruzana.
¿Qué es la histotecnología?
Es una ciencia, rama de la histología, que se centra en el procesamiento, corte y tinción de tejidos biológicos para su observación microscópica, con el fin de obtener información sobre la estructura, la función y la patología de los órganos y los sistemas del cuerpo humano. La histotecnología es fundamental para el diagnóstico médico, ya que permite identificar las alteraciones celulares y tisulares que causan o reflejan las enfermedades.
La histotecnología se realiza en laboratorios especializados, donde se reciben las muestras de tejidos que provienen de biopsias, cirugías, autopsias o donaciones. Los histotecnólogos desempeñan un papel crucial en la investigación médica, permitiendo la identificación de patologías y contribuyendo al diagnóstico preciso de enfermedades.
¿Qué es el embalsamado?
Es el proceso de preservación temporal de un cuerpo fallecido, mediante la aplicación de sustancias químicas y procedimientos estéticos, con el fin de retardar su descomposición y mejorar su aspecto. El embalsamado es una práctica muy antigua, que se remonta a las civilizaciones egipcia, china, inca, maya y azteca, entre otras, que realizaban rituales de momificación para preservar los cuerpos de sus gobernantes, sacerdotes o guerreros.
El embalsamado moderno se desarrolló a partir del siglo XIX, con el avance de la química, la anatomía y la medicina. Esta actividad se realiza en salas de tanatopraxia, donde se reciben los cadáveres que provienen de hospitales, morgues o domicilios. Con técnicas químicas y procedimientos especiales, los embalsamadores buscan retardar el proceso de descomposición, permitiendo velatorios y funerales.
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¿Cómo se vinculan la histotecnología y el embalsamado?
Tanto la histotecnología y el embalsamado tienen la misma preocupación por la preservación de los tejidos. Ambas áreas comparten algunos conocimientos y habilidades, como la anatomía, la fisiología, la patología, la química, la bioseguridad, la tanatología, la ética, la estética, la destreza manual, la precisión, la responsabilidad, el respeto y la discreción, entre otros. De esta manera, los histotecnólogos contribuyen al diagnóstico médico, mientras que los embalsamadores honran la memoria de quienes han partido.
Asimismo, los profesionistas de estas carreras se complementan, ya que la histotecnología puede aportar información valiosa para el embalsamado, como el tipo y el grado de la enfermedad que causó la muerte, o las posibles complicaciones que podrían presentarse durante el proceso de conservación. El embalsamado, por su parte, puede facilitar el trabajo de la histotecnología, al preservar los tejidos y los órganos que pudieran ser utilizados para fines de investigación o de docencia.
¿Qué hace un histotecnólogo?
Se trata del experto que estudia los fundamentos técnicos y procesos de manipulación necesaria para lograr analizar los tejidos de cualquier ser vivo. Su finalidad es lograr examinarlos con un alto nivel de detalle. El histotecnólogo trabaja en laboratorios médicos, procesando tejidos para diagnosticar enfermedades, para investigaciones médicas y para avances en tratamientos.
Las funciones de un histotecnólogo son las siguientes:
- Recibir, identificar, registrar y almacenar las muestras de tejidos que provienen de biopsias, cirugías, autopsias o donaciones.
- Fijar, incluir, cortar, teñir y montar las muestras de tejidos, siguiendo los protocolos y los estándares de calidad establecidos.
- Examinar, verificar y etiquetar los cortes histológicos, asegurando su integridad y su adecuación para el análisis microscópico.
- Operar, calibrar y mantener los equipos e instrumentos del laboratorio, como el micrótomo, el microscopio, el procesador de tejidos y el baño de flotación, entre otros.
- Colaborar con los médicos patólogos, los cirujanos, los investigadores o los docentes, proporcionando los cortes histológicos y los informes correspondientes.
- Cumplir con las normas de bioseguridad, de calidad y de ética, protegiendo su salud, la de sus compañeros y la de los pacientes o donantes.
¿Qué hace un embalsamador?
Este especialista se dedica a conservar los cadáveres humanos, mediante la aplicación de sustancias químicas y procedimientos estéticos, retardando su descomposición y mejorando su aspecto. Para ello, realiza el lavado y la desinfección, así como la eliminación de líquidos y gases de los cuerpos, sustituyéndolos por conservantes inyectados. Así, utiliza técnicas que preservan la apariencia y dignidad del difunto.
Las funciones de un embalsamador son las siguientes:
- Recibir, identificar, registrar y trasladar los cuerpos de los fallecidos que provienen de hospitales, morgues o domicilios.
- Lavar, desinfectar, extraer, inyectar y maquillar los cuerpos, siguiendo los protocolos y los estándares de calidad establecidos.
- Examinar, verificar y etiquetar los cuerpos, asegurando su integridad y su adecuación para la exhibición.
- Operar, calibrar y mantener los equipos e instrumentos de la sala de tanatopraxia, como la bomba de inyección, la cánula, la aspiradora y el maquillaje, entre otros.
- Colaborar con los familiares, los amigos, los funerarios o los religiosos, proporcionando los cuerpos y los servicios correspondientes.
- Cumplir con las normas de bioseguridad, de calidad y de ética, protegiendo su salud, la de sus compañeros y la de los fallecidos o sus deudos.
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¿Qué necesitas para convertirte en un histotecnólogo y embalsamador?
Para ser un profesionista que domine ambas áreas, se requiere de una formación que generalmente implica una tecnicatura superior. Esto incluye completar los cursos especializados en técnicas de embalsamado, ética funeral y regulaciones locales. Como parte del perfil de los aspirantes, esta profesión requiere que los estudiantes tengan las siguientes características:
- Pensamiento crítico y reflexivo.
- Capacidad para la adquisición de los conocimientos científicos.
- Interés por el área de ciencias naturales, químicas, biológicas y área de investigación.
- Habilidad para discernir, asimilar, comprender y analizar.
- Destreza manual y responsabilidad.
- Habilidad psicomotriz fina.
- Posee habilidad práctica y capacidad para el trabajo bajo tensión.
- Responsabilidad y ética.
- Higiene personal.
- Reflejar en su actitud profundo humanismo.
- Espíritu de servicio.
- Prestancia para actividad y comunicación.
- Respeto personal y colectivo.
- Integridad bio-psico-social.
La histotecnología y el embalsamado ofrecen oportunidades de carrera únicas en el cuidado de la salud y el servicio funerario. Si deseas trabajar en un área con significado y valor, considera explorar estas disciplinas que son muy importantes para la sociedad. Sin embargo, suelen ser poco conocidas y valoradas, por lo que requieren de una formación técnica y especializada, así como de una vocación de servicio.
¿Dónde estudiar una carrera en histotecnología y el embalsamado?
Si te interesa aprender sobre estas disciplinas, entonces debes saber que en México puedes estudiar una carrera que aborda ambas temáticas, como es la Tecnicatura Superior en Histotecnólogo y Embalsamador de la Universidad Veracruzana. Este programa, con una duración de dos años y medio, forma un profesionista altamente especializado en responder las necesidades durante el procesamiento de tejidos para su diagnóstico histopatológico, conservación de cadáveres y restos humanos.
El objetivo de esta carrera técnica es formar especialistas comprometidos con el entorno ambiental y los valores humanos, capaces de desenvolverse eficientemente en laboratorios de histotecnología, salas de autopsia y agencias funerarias. Además, puedan ejercer en salas de autopsias clínicas y médico-legales, bajo supervisión del personal médico. El plan de estudios ofrece una formación teórica-práctica basada en competencias, principios y valores éticos humanos al servicio de la comunidad.
No esperes más y empieza a estudiar una carrera que te permitirá trabajar al servicio de la vida, tanto en el ámbito clínico como en el funerario. Te sorprenderás de lo que puedes aprender y de lo que puedes hacer con la histotecnología y el embalsamado. Deja tus datos en el formulario que se encuentra en esta página y descubre las ventajas de estudiar histotecnología y embalsamado en la Universidad de Veracruz.