Una prioridad para todas las sociedades a nivel global es una buena gestión de la administración pública. El motivo se centra en que la misma busca determinar y promover una relación cercana entre el sector político del momento —el gobierno— y la población, no solo en las diferentes instituciones burocráticas que existen en el Estado, sino también en las entidades de salud, las empresas estatales, el servicio postal, los parques nacionales, las fuerzas del orden público, entre otras organizaciones.
Con base en este tipo de administración, existen diferencias que son sumamente importantes al momento de desarrollar la disciplina de manera formal. Si este es tu caso, hoy te contaremos en detalle en qué consisten la administración centralizada y la descentralizada, para que puedas conocer el panorama completo de esta rama disciplinar y tomes tu decisión de manera segura.
Descubre: Mejores universidades para estudiar Administración de Empresas en CDMX
Administración pública: elementos que la conforman
Para que la administración pública pueda llevarse a cabo de manera eficaz, debe generarse un correcto funcionamiento de los elementos que la conforman. Entre ellos se encuentran:
- Objetivos viables. La administración pública tiene una tarea trascendental, la cual consiste en organizar a la sociedad. Sin embargo, debe proponer y llevar adelante otros objetivos para incentivar el crecimiento y desarrollo de los distintos sectores.
- Organización y planificación de los distintos medios y recursos que comprenden la administración pública. Este elemento es esencial debido a que toda la estructura organizacional puede caerse si no se planifica de manera eficiente.
- Personas preparadas y capacitadas que lleven adelante las acciones y procedimientos según los objetivos previamente fijados. Profesionales que puedan enfrentar los obstáculos y las dificultades del día a día, aportando soluciones ajustadas y efectivas, son cruciales para esta labor.
- Medios económicos, tanto tributarios como no tributarios, que sostengan las acciones públicas y permitan generar no solo una mejora, sino también un desarrollo constante.
Con todo esto en mente, podemos tener una idea más amplia de lo que enfrenta un profesional de la administración pública. Sin embargo, el panorama es mucho más amplio y, dependiendo de la conformación y características del poder, la administración tomará su lugar desde una perspectiva particular: centralizada o descentralizada.
Administración pública centralizada: ejemplos
Al hablar de centralización, se hace referencia a los casos en que la autoridad o el poder se encuentra concentrado, por lo que la toma de decisiones la asume una sola persona o un grupo particular. Esta forma de administración suele realizarse con el fin de optimizar el trabajo de todo el equipo.
Es reconocida esta modalidad de la administración en las instituciones públicas y la gestión gubernamental. Incluye los procesos de planificar, organizar, dirigir y controlar, para alcanzar el bien común. Aquí, la persona de mayor jerarquía dentro de un gobierno es quien se hace cargo de las decisiones finales, mientras que el resto de las instituciones y áreas acatan.
Algunos ejemplos de administración pública centralizada son:
- Ministerios o secretarías de gobierno
- Agencias federales, por ejemplo, la Agencia de Protección Ambiental o el FBI.
- Sistemas de salud nacionales
- Sistemas educativos centralizados
- Autoridades de impuestos y aduanas, como la Administración Federal de Ingresos Públicos en Argentina o la Internal Revenue Service (IRS) en EE. UU.
- Defensa nacional y fuerzas armadas
- Bancos centrales
Administración pública descentralizada: ejemplos
En cuanto a la descentralización, se trata de la acción de transferir o delegar la autoridad a otros órganos, figuras jurídicas o puestos. Puede ser tanto a individuos como a sectores específicos, los cuales serán responsables de tomar decisiones eficientes y aportar soluciones específicas.
En los entes gubernamentales en que se presenta este tipo de administración, esto sucede con el fin de ceder parte de la autoridad a otras áreas gubernamentales para que puedan ocuparse de forma completa. Dentro de las ventajas de la descentralización, podemos encontrar el aprovechamiento de tiempo, ya que al ser las mismas áreas quienes deciden, la gestión es mucho más rápida y eficiente.
Algunos ejemplos de administración pública descentralizada son:
- Gobiernos locales o municipales, como ayuntamientos o alcaldías.
- Gobiernos regionales o estatales
- Entidades autónomas o paraestatales, por ejemplo, universidades públicas, hospitales regionales y corporaciones de transporte público que, aunque financiadas o supervisadas por el gobierno, operan con cierto grado de independencia.
- Autoridades de salud regional
- Empresas de servicios públicos locales, es decir, compañías que proveen servicios como agua, electricidad o gestión de residuos a nivel municipal o regional.
Diferencia entre administración pública centralizada y descentralizada
- En la administración pública centralizada, el poder se concentra en una persona o grupo. En el caso de la administración pública descentralizada, el poder es compartido entre diferentes instancias.
- En cuanto a las decisiones, en la administración pública centralizada suelen ser unilaterales. Mientras que en la administración pública descentralizada cada ente puede tomar sus propias decisiones.
- Al momento de ejecutar acciones, la administración pública centralizada exige autorización del poder central. A diferencia de la administración descentralizada, en donde las gestiones que realice cada instancia son independientes.
- En la administración pública centralizada, las actividades y procedimientos no se duplican. Distinto a la administración pública descentralizada, donde existe el riesgo de que se repitan las tareas y procesos.
- En el caso de la administración centralizada, el distanciamiento entre el poder centralizado y los subordinados puede acarrear menos conexión entre ambas figuras, mientras que en la administración descentralizada existe un mayor compromiso de las instancias de poder involucradas, fortaleciendo el trabajo de los subordinados.
¿Quieres estudiar administración pública?
En México existen diversos programas dedicados a la carrera de administración pública. En el caso de licenciaturas, se encuentran las siguientes:
- Licenciatura en Línea en Ciencias Políticas y Administración Pública - UTEL Universidad Tecnológica Latinoamericana en Línea
- Licenciatura en Administración Pública - Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca
- Licenciatura en Administración Pública - Universidad Abierta de Tlaxcala
- Licenciatura en Administración Pública - Universidad Internacional de América
- Licenciatura en Administración Pública y Ciencia Política - Universidad Insurgentes
En cuanto a programas de diplomado, resaltan:
- Diplomado en Gobernanza y Administración Pública Electrónica - Universidad Anáhuac México Sur
- Diplomado en Administración Publica - Euroinnova International Online Education
- Diplomado en Administración Pública - Instituto Nacional de Administración Pública
Algo a tener en cuenta es que varias de estas carreras se imparten en línea y, de esta manera, ofrecen una oportunidad única a los estudiantes, ya que pueden comenzar su formación superior sin trasladarse de su hogar. Dicha modalidad de estudio brinda autonomía y flexibilidad y genera un espacio académico de continua formación y apoyo para formar profesionales altamente capacitados que lideren el campo de la administración pública.
¿Deseas mayor información sobre alguno de los programas anteriormente mencionados, o de las universidades que los imparten? Puedes llenar el formulario que se encuentra en esta página. De esa manera, un asesor estudiantil podrá contactarte y ayudarte con las consultas y dudas.
Para ampliar esta información, consulta todas las carreras de administración pública que tenemos en nuestro portal.
¡Estudiar nunca fue tan fácil!
Sigue leyendo más en: